"Los efectos de esta droga han sido descritos con
frecuencia: trastornos en la percepción espacio-temporal, sensibilidad aguda
para las impresiones, fuga de ideas, risa convulsiva, estupidez. La marihuana
es un sensibilizador y sus efectos no siempre son agradables. Hace que una
situación mala sea peor. La depresión se vuelve desesperación, la ansiedad
pánico. Ya he mencionado mi horrible experiencia con marihuana durante un período agudo de carencia de morfina.
En cierta ocasión le di marihuana a un invitado que estaba ligeramente ansioso con
respecto a algo («Estoy inquieto», había dicho). Tras fumar medio cigarrillo,
se puso en pie de un salto y, gritando «¡Tengo miedo!», salió de la casa
corriendo.
Un aspecto particularmente enervante de la
intoxicación con marihuana es la perturbación de la orientación afectiva. No se
sabe si algo gusta o no, si una sensación es agradable o desagradable.
El uso de la marihuana varía mucho con cada
individuo. Unos la fuman constantemente, otros a veces, y a no pocos les
desagrada de modo muy intenso. Parece que es especialmente impopular entre los
morfinómanos, muchos de los cuales adoptan una actitud puritana con respecto a
los fumadores de marihuana.
Los efectos desagradables de la marihuana se han
exagerado mucho en Estados Unidos. Nuestra droga nacional es el alcohol.
Tendemos a considerar el uso de cualquier otra droga con especial horror. Cualquiera
que se entregue a esos vicios extranjeros se expone a la ruina completa de
cuerpo y mente. La gente cree lo que quiere creer sin tener en cuenta los
hechos. La marihuana no crea hábito. Nunca he observado que su uso moderado
produzca efectos peligrosos. Las psicosis, por efecto de la droga, quizá sean
consecuencia de un uso prolongado y excesivo."
Naked Lunch
William S. Burroughs